Entonces empieza el camino a casa, siempre con música a tope, gritando hasta cansarte las canciones que una y otra vez te han repetido en el sintonizador de la radio; pues hoy NO. Ha sido el día del silencio. Quizá sean hormonas, quizá el mes y pico de exámenes, quizá las peleas, el echar de menos a los amigos que se han ido ya, a mis hermanos, que hoy me diera cuenta de que es una más para el año que viene, o el hecho de necesitar mimos en un día en el que todos están ausentes. Todo hoy parecia estar mal, quizá fuera yo.
Gracias a todos aquellos que, aún yendo pensativa conduciendo, no os habéis chocado contra mi; el coche tiene que durar.
Llegar y silencio en casa, ni el perro ha ladrado, quizá presentía mi necesidad. Así que BlackBerry en silencio y a escribir. Sé que me dejo tantísimo por decir... pero eso mejor me lo guardo para mi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario